viernes, 21 de enero de 2011

When he kisses me.

-Tengo miedo.

No, te equivocas, ahora no hay motivos para tener miedo. Nadie más, solos tú y yo. Bésame, bésame ya, humedece mis labios con mi propia droga, tus labios. Porfavor, no roces otras manos, no te alejes de mi piel, necesito sentir el calor que desprende tu cuerpo, necesito sentirte cerca. Sí, eres tú, lo sé, eres tú. Por ti me he levantado cada mañana con una sonrisa aún sin conocerte, por ti aprendí a amar. Ahora sé lo que he estado esperando toda mi vida, porque antes de ti, antes de ti... no recuerdo antes de ti. Es como si toda mi vida se hubiese resumido en el tiempo que llevamos juntos. Como si notase tu existencia aún sin conocerla.

-Cariño... ¿dónde has estado todo este tiempo que pasé sin ti?
-Esperándote.


Nunca sentí tus labios, siempre te sentía a ti, y a tu lado, jamás tuve frío, el calor de tus abrazos me hacían dejar de tiritar. Porque ''mi vida''... son las dos palabras que mejor definen tu latir.

-Sonríeme... no, ya no tengo miedo.

2 comentarios: